BioBase AKN-01: precisión Kjeldahl accesible y segura
El analizador Kjeldahl semiautomático AKN-01 de BioBase es un aparato de destilación diseñado para medir con precisión el contenido de nitrógeno o proteínas. Se utiliza en numerosos ámbitos: alimentación, agricultura, investigación científica, medio ambiente, producción de tabaco o forrajes y enseñanza. Su fiabilidad se basa en la aplicación del método Kjeldahl, estándar en los laboratorios para el análisis cuantitativo del nitrógeno total.
El sistema admite muestras sólidas (hasta 6 g) y líquidas (hasta 20 ml), con un tiempo de destilación ajustable de 0 a 60 minutos. La velocidad de destilación es de entre 3 y 6 minutos por muestra, lo que garantiza un flujo rápido sin comprometer la precisión. La repetibilidad ≤0,5 % permite obtener resultados constantes, lo que es esencial para protocolos reproducibles, especialmente en laboratorios de control de calidad.
La pantalla LCD en color de 7 pulgadas ofrece una gran comodidad de uso, con una visualización clara y legible de los parámetros experimentales. El modo de funcionamiento manual/automático garantiza una buena adaptabilidad a los hábitos del técnico o a los requisitos específicos de determinados procesos. La flexibilidad de uso es ideal para estructuras que trabajan con matrices variadas.
En cuanto a la seguridad, el AKN-01 está equipado con varios dispositivos de protección integrados: alarmas en caso de caudal anormal, sobrecalentamiento, sobrepresión o nivel crítico de líquido. Estos mecanismos de protección refuerzan la fiabilidad de los análisis y protegen tanto a los operadores como a las muestras. Cabe señalar que el modelo no dispone de detección automática del nivel de las botellas de reactivos, por lo que es necesario realizar una comprobación manual antes de cada serie de análisis.
El consumo de agua de refrigeración está limitado a 1,5 l/min, lo que reduce los costes de explotación y el impacto medioambiental. El modelo tampoco dispone de vaciado automático, lo que implica una gestión manual de los residuos al final del ciclo. No obstante, la sencillez de la limpieza y la robustez de los componentes hacen que estas operaciones sean poco engorrosas.
Compacto (490 × 380 × 725 mm) y con un peso de 35 kg, el AKN-01 se integra fácilmente en cualquier mesa de laboratorio. Su formato permite un manejo cómodo y mantiene una buena estabilidad.
El aparato también puede utilizarse para otros tipos de análisis, como la detección de sales de amonio,ácidos oálcalis volátiles, o la medición de la capacidad de intercambio catiónico de los suelos, lo que refuerza su versatilidad para estructuras con necesidades analíticas amplias.