La bomba de jeringa Graseby 3100 es un dispositivo médico fiable y eficaz que permite administrar con precisión medicamentos a través de jeringas. Gracias a su diseño compacto y sus funciones avanzadas, se utiliza ampliamente en entornos clínicos y hospitalarios para la administración segura y controlada de medicamentos.
La bomba de jeringa Graseby 3100 es un dispositivo médico versátil diseñado para satisfacer las diversas necesidades de los profesionales sanitarios en entornos clínicos.
Este modelo ofrece una gama de funciones que lo convierten en la opción ideal para la perfusión intravenosa de medicamentos. Es capaz de administrar medicamentos a caudales de entre 0,1 y 199,9 ml/h, lo que ofrece la flexibilidad necesaria para tratar diferentes terapias farmacológicas. Además, la bomba admite jeringas de 20 ml, 30 ml y 50 ml/60 ml, lo que ofrece una mayor versatilidad a los profesionales sanitarios.
La facilidad de uso es uno de los puntos fuertes de la bomba de jeringa Graseby 3100, lo que la hace fácil de usar de forma eficaz por el personal médico. Su diseño ergonómico mejora la comodidad del usuario durante su uso, mientras que su interfaz intuitiva simplifica el proceso de perfusión.
Además de su diseño fácil de usar, la bomba de jeringa Graseby 3100 es económica, lo que la convierte en una solución de bajo coste para los centros médicos que buscan sistemas de administración de medicamentos fiables. Puede alimentarse tanto por red eléctrica como por una batería recargable interna, lo que ofrece una gran flexibilidad de uso y garantiza un funcionamiento ininterrumpido incluso en caso de cortes de corriente.
La seguridad es fundamental en los equipos médicos, y la bomba de jeringa Graseby 3100 está equipada con funciones de seguridad avanzadas para proteger tanto a los pacientes como a los profesionales sanitarios. Cuenta con una alarma rápida en caso de oclusión y una presión de oclusión ajustable para evitar bloqueos y garantizar una administración fluida de las perfusiones. La detección automática del tamaño de la jeringa y una función de totalizador mejoran aún más la precisión y la eficacia de la administración de medicamentos.
Además de sus funciones básicas, la bomba de jeringa Graseby 3100 es compatible con diferentes marcas de jeringas, lo que garantiza la compatibilidad y la flexibilidad en la administración de medicamentos. Su capacidad de detección automática del tamaño de la jeringa también facilita su uso, ya que detecta automáticamente el tamaño de la jeringa utilizada y ajusta los parámetros en consecuencia.
La bomba cuenta con una pantalla de texto claro que proporciona a los usuarios información fácilmente legible y facilita un uso intuitivo. Una gama completa de alarmas avisa a los usuarios de posibles problemas o desviaciones de los parámetros deseados, lo que mejora la seguridad de los pacientes y la eficacia del tratamiento.
Diseñada en colaboración con los usuarios, la bomba de jeringa Graseby 3100 refleja las aportaciones y los comentarios de los profesionales sanitarios, lo que garantiza que satisfaga las necesidades prácticas y las preferencias de quienes la utilizan en entornos clínicos. Su construcción resistente a las salpicaduras (IPX1) protege contra derrames accidentales o la exposición a líquidos, lo que refuerza su durabilidad y fiabilidad.
La Graseby 3100 ofrece un rendimiento fiable y un control preciso de la administración de medicamentos. Numerosas alarmas, acompañadasde avisos acústicos y visuales, proporcionan alertas rápidas a los usuarios, lo que garantiza una intervención rápida en caso de problemas durante los procedimientos de perfusión. Estas advertencias incluyen una alarma de jeringa casi vacía de tres minutos, que ayuda a prevenir interrupciones en la administración de medicamentos.
Además, todos los materiales utilizados en la fabricación de la bomba de jeringa Graseby 3100 están libres de látex, lo que reduce el riesgo de reacciones alérgicas y garantiza la compatibilidad con una amplia gama de pacientes.
Las especificaciones de la bomba de jeringa Graseby 3100 incluyen un rango de tiempo de perfusión de 30 minutos a 60 horas, lo que ofrece la flexibilidad necesaria para adaptarse a diferentes protocolos de tratamiento. El rango de velocidad es variable, con ajustes de 0 a 99 mm/h, lo que permite un control preciso de los caudales de perfusión para satisfacer las necesidades específicas de los pacientes y las terapias.
Además, la bomba de jeringa Graseby 3100 incluye una batería para mayor comodidad y portabilidad. El tipo de batería es alcalina de 9 voltios, lo que proporciona una alimentación fiable para un funcionamiento ininterrumpido. Con una autonomía capaz de alimentar 50 jeringas completas, los profesionales sanitarios pueden confiar en la bomba para un uso prolongado sin necesidad de cambiar la batería con frecuencia.
Los controles de usuario de la bomba de jeringa Graseby 3100 están diseñados para ser sencillos y fáciles de usar. El dispositivo cuenta con un botón de inicio/prueba para iniciar los procedimientos de perfusión y comprobar el correcto funcionamiento de la bomba. Dos ruedas de ajuste de velocidad permiten a los usuarios ajustar con precisión los caudales de perfusión según los regímenes posológicos prescritos, lo que garantiza una administración precisa de los medicamentos.
Un completo sistema de alarma en la bomba de jeringa Graseby 3100 emite alertas sonoras y visuales para informar a los usuarios de eventos críticos o fallos del sistema. Las alarmas de fin de carrera indican a los usuarios cuando la jeringa ha llegado al final de su recorrido, señalando así la finalización del proceso de perfusión. Las alarmas de oclusión indican posibles obstrucciones en la línea de perfusión, lo que requiere una intervención inmediata para evitar complicaciones. Las alarmas de batería baja se indican visualmente con una luz indicadora que deja de parpadear para alertar a los usuarios de la necesidad de sustituir o recargar la batería.
Estas funciones de alarma contribuyen a la seguridad de los pacientes al garantizar una respuesta rápida en situaciones críticas, lo que reduce el riesgo de errores o interrupciones en la administración de medicamentos. Con sus controles intuitivos, su funcionamiento fiable con batería y su completo sistema de alarma, la bomba de jeringa Graseby 3100 ofrece a los profesionales sanitarios una solución fácil de usar y fiable para la administración precisa de medicamentos en entornos clínicos.
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