La combinación perfecta de ergonomía, seguridad y rendimiento: las puntas ClipTip™ Reload Tower
Las puntas para pipetas ClipTip™ Reload Tower representan un avance en el campo del pipeteo de precisión. Diseñadas por Thermo Fisher Scientific para integrarse exclusivamente en sus gamas F1-ClipTip™ y E1-ClipTip™, estas puntas garantizan una experiencia de pipeteo segura, cómoda y altamente reproducible. La clave de su eficacia reside en la tecnología patentada ClipTip®, que crea un cierre hermético entre la pipeta y la punta. Este mecanismo elimina los problemas habituales de desprendimiento accidental o fugas, incluso durante el pipeteo repetitivo.
El diseño Reload Tower permite un ahorro considerable de tiempo en la gestión de los consumibles en el laboratorio. Cada torre contiene insertos apilados, fáciles de transferir a racks vacíos gracias a un mecanismo sencillo e intuitivo. Este formato reduce considerablemente los residuos de embalaje, al tiempo que mantiene la limpieza y la trazabilidad de los consumibles. Los insertos están disponibles en versiones estériles y no estériles, lo que garantiza una flexibilidad óptima para los protocolos de biología molecular, microbiología o química analítica.
Fabricadas en polipropileno (PP) de alta calidad, las puntas ClipTip™ Reload Tower ofrecen una baja retención para maximizar la recuperación de muestras, incluso con líquidos viscosos. Los modelos con filtro estéril proporcionan una protección adicional contra la contaminación cruzada y son ideales para entornos de laboratorio regulados.
Cada lote de puntas se controla rigurosamente y se certifica libre de RNasa, DNasa, ADN, ATP y endotoxinas. Estas certificaciones garantizan un rendimiento fiable, incluso en las aplicaciones más sensibles, como la PCR o el cultivo celular. La información del lote y la trazabilidad se imprimen directamente en los insertos para un control de calidad óptimo.
La perfecta compatibilidad con las pipetas Thermo Fisher permite una manipulación fluida, lo que reduce la fatiga del usuario y aumenta la productividad. Los colores codificados por volumen facilitan la identificación rápida de las puntas adecuadas, lo que limita los errores humanos.