Cromatógrafo de fase gaseosa Agilent 7890A: rendimiento y precisión para análisis fiables
El cromatógrafo de fase gaseosa Agilent 7890A está diseñado para ofrecer un rendimiento excepcional y una gran fiabilidad en una amplia gama de aplicaciones analíticas. Se trata de una herramienta esencial para los laboratorios que buscan una precisión reproducible y una mayor productividad sin comprometer la facilidad de uso.
El núcleo tecnológico del 7890A se basa en un control electrónico de la neumática (EPC) de quinta generación y una electrónica digital de vanguardia. Esta combinación garantiza una regulación precisa de la presión y el flujo, lo que permite mantener condiciones de análisis constantes entre ciclos. Esta estabilidad se traduce en tiempos de retención reproducibles y una gran fidelidad de los resultados, independientemente del operador o la ubicación del sistema.
La gestión térmica del 7890A ha sido cuidadosamente estudiada para reducir los tiempos entre análisis. Gracias a la tecnología Low Thermal Mass (LTM), el sistema es capaz de calentar y enfriar las columnas capilares directamente, lo que acelera considerablemente los ciclos analíticos. Esta rapidez permite procesar un mayor número de muestras en plazos reducidos, satisfaciendo así las exigencias de los laboratorios de alto rendimiento.
El sistema también ofrece una flexibilidad extraordinaria gracias a una amplia gama de opciones de inyección y detección. Los usuarios pueden configurar el 7890A según las necesidades específicas de sus aplicaciones, ya sea para el análisis de hidrocarburos complejos, pesticidas en matrices alimentarias o gases refinados. La posibilidad de añadir hasta tres detectores simultáneos abre nuevas perspectivas para análisis multidimensionales complejos.
La ergonomía del 7890A ha sido diseñada para simplificar el trabajo diario de los cromatógrafos. Su panel de control intuitivo incluye un botón de acceso directo a la información de mantenimiento, lo que reduce considerablemente los tiempos de inactividad y facilita el manejo a los nuevos usuarios. Además, los laboratorios que utilizan el modelo Agilent 6890 pueden transferir sus métodos existentes al 7890A sin dificultad, lo que garantiza una continuidad perfecta en sus procesos analíticos.
Funciones como la tecnología Capillary Flow ofrecen ventajas concretas. Esta innovadora tecnología garantiza conexiones fiables y sin fugas en el interior del horno, lo que permite utilizar técnicas sofisticadas como el backflush y el Deans Switch para mejorar la calidad de los análisis. Estas herramientas ayudan a preservar la integridad de las columnas y los detectores, reduciendo la contaminación y prolongando la vida útil de los componentes.
El 7890A está diseñado para evolucionar con las necesidades del laboratorio. Su diseño modular y su amplia gama de accesorios permiten una rápida adaptación a nuevas aplicaciones. En combinación con el software Agilent ChemStation o Lab Advisor, ofrece un entorno de trabajo completo para la gestión de datos, el seguimiento en tiempo real y el cumplimiento normativo.
El Agilent 7890A es mucho más que un cromatógrafo de fase gaseosa. Es una plataforma analítica completa que combina rendimiento, fiabilidad y escalabilidad, lo que permite a los laboratorios afrontar los retos más complejos al tiempo que optimizan sus recursos y su productividad.