Thermo 500 de Gymna: diatermia de ondas cortas pulsadas para un tratamiento terapéutico eficaz
El Thermo 500 de Gymna es un aparato de diatermia por ondas cortas pulsadas que permite tratar una gran variedad de patologías relacionadas con los tejidos blandos y las afecciones articulares. Está destinado a los profesionales de la salud que desean ofrecer una terapia eficaz y adaptada a las necesidades de sus pacientes.
Su funcionamiento se basa en la aplicación de ondas cortas pulsadas, lo que ofrece un enfoque atérmico ideal para el tratamiento de inflamaciones agudas, lesiones postoperatorias y traumatismos recientes. Esta técnica favorece la cicatrización y limita la transmisión de calor a los tejidos circundantes. Mediante el ajuste de parámetros específicos, el dispositivo genera un efecto térmico eficaz, beneficioso para afecciones crónicas como tendinitis, contracturas musculares y dolores lumbares.
El Thermo 500 está equipadocon electrodos Thermoplodes, especialmente diseñados para garantizar una difusión homogénea de la energía sin absorción excesiva por los tejidos adiposos. La presencia de una pantalla de Faraday limita las interferencias con otros equipos médicos, garantizando así un uso seguro. Una Thermoplode de 14 cm de diámetro es compatible y adecuada para el tratamiento de grandes zonas musculares. También hay disponible una Thermoplode de 8 cm opcional para el tratamiento de articulaciones y zonas más localizadas.
Uno de los puntos fuertes del Thermo 500 es su capacidad para tratar dos zonas simultáneamente gracias a sus dos canales independientes. Esta función permite optimizar las sesiones de tratamiento combinando diferentes tamaños de electrodos para un tratamiento adaptado. Su sistema de regulación automática ajusta la emisión de energía en función del diámetro de los electrodos conectados, lo que garantiza una mayor precisión en la difusión de las ondas.
La interfaz del Thermo 500 está diseñada para ofrecer una experiencia de usuario intuitiva. Dispone de 38 programas pregrabados que cubren una amplia gama de indicaciones, entre las que se incluyen la tendinitis del cuádriceps, la epicondilitis y la mialgia. El usuario puede registrar hasta 50 protocolos personalizados, lo que facilita una adaptación precisa a las necesidades específicas de los pacientes.
En cuanto a la seguridad, el aparato está equipado con un sistema inteligente de control de la energía transferida. Si un electrodo se desplaza o pierde su contacto óptimo con la piel, el tratamiento se detiene automáticamente y una señal acústica y visual avisa al usuario. Esto garantiza la máxima eficacia y evita cualquier riesgo de sobrecalentamiento o aplicación incorrecta.