Liko UNO 102: elevador eléctrico compacto y versátil diseñado para facilitar la transferencia y la movilidad de los pacientes con total seguridad.
El elevador eléctrico Liko UNO 102 ofrece movilidad y practicidad con su brazo de elevación de funcionamiento eléctrico. Diseñado principalmente para su uso en centros de cuidados postagudos, como residencias de ancianos y centros de cuidados, el Uno 102 destaca en la atención de las necesidades de elevación más comunes que se encuentran en entornos sanitarios. Ya sea para trasladar pacientes entre la cama y la silla de ruedas, ayudar en los traslados al baño o facilitar la elevación desde y hacia el suelo, el Uno 102 ofrece una solución fiable para el personal sanitario.
Una de las características más destacadas del Uno 102 son sus tres ajustes de altura alternativos, que garantizan una altura de elevación óptima para diferentes situaciones. El ajuste estándar, situado en la posición media, es adecuado para las tareas de elevación habituales. Por su parte, la posición más baja es ideal para levantar a niños o realizar traslados desde y hasta el suelo, lo que ofrece una mayor versatilidad. En cambio, la posición más alta es adecuada para levantar a pacientes hacia superficies elevadas, como camas y camillas de altura fija, lo que ofrece flexibilidad en diferentes entornos de cuidados.
La personalización desempeña un papel crucial en la maximización de la funcionalidad y la seguridad del elevador Uno 102. El ajuste individual de las eslingas y otros accesorios de elevación garantiza una experiencia de elevación segura y cómoda para los pacientes. Al adaptar la configuración del elevador a las necesidades y requisitos específicos del paciente, los cuidadores pueden mejorar tanto la eficiencia como la seguridad de los traslados de pacientes, lo que favorece una prestación óptima de los cuidados.
El elevador eléctrico Liko UNO 102 combina movilidad, versatilidad y seguridad para satisfacer las exigentes necesidades de elevación que se encuentran en los centros sanitarios. Con su diseño fácil de usar y sus funciones personalizables, el Uno 102 ofrece al personal sanitario una solución fiable y eficaz para facilitar traslados seguros y cómodos de pacientes en una gran variedad de entornos asistenciales.
El elevador eléctrico Liko UNO 102 ofrece unas impresionantes capacidades para facilitar las tareas de cuidado de los pacientes con facilidad y eficacia. Con una capacidad de carga máxima de 175 kg, el Uno 102 proporciona un soporte de elevación fiable para una amplia gama de pacientes, lo que garantiza traslados seguros en diversos entornos de cuidados.
Fabricado en acero pintado con pintura en polvo duradera, el Uno 102 está diseñado para soportar el rigor del uso diario en entornos sanitarios. Este material resistente garantiza la durabilidad y la estabilidad del elevador, lo que ofrece a los cuidadores una solución de elevación fiable para sus necesidades de manipulación de pacientes.
Con un intervalo de elevación de 1270 mm (50 pulgadas), el Uno 102 ofrece un ajuste de altura más que suficiente para satisfacer diferentes necesidades de elevación. Ya sea para levantar pacientes del suelo o trasladarlos a superficies elevadas, el intervalo de elevación ofrece flexibilidad y versatilidad para satisfacer diversas necesidades de cuidados.
Con una velocidad de elevación de 30 mm/seg (1,18 pulgadas/seg) sin carga, el Uno 102 ofrece un rendimiento de elevación suave y eficaz. Esta rápida velocidad de elevación mejora la eficiencia del flujo de trabajo del personal sanitario, lo que permite transferencias más rápidas y reduce la incomodidad de los pacientes durante las operaciones de elevación.
En resumen, la grúa eléctrica Liko UNO 102 combina una construcción robusta, una capacidad de elevación más que suficiente y un rendimiento eficaz para proporcionar a los cuidadores una solución fiable para traslados de pacientes seguros y cómodos. Con su construcción de acero duradero, su intervalo de elevación ajustable y su rápida velocidad de elevación, el Uno 102 está diseñado para satisfacer las exigentes necesidades de elevación que se encuentran en los entornos sanitarios, garantizando una atención óptima a los pacientes.