Memmert IPP30: incubadora refrigerada Peltier de alto rendimiento y bajo consumo energético para un control térmico preciso
La incubadora refrigerada Memmert IPP30 está especialmente diseñada para satisfacer las exigencias de los laboratorios de investigación, análisis y control de calidad que requieren un entorno térmico estable para el cultivo de muestras. Gracias a su sistema de regulación de temperatura basado en la tecnología Peltier, permite alcanzar y mantener temperaturas entre 0 y +70 °C, lo que ofrece la posibilidad de trabajar muy por debajo de la temperatura ambiente. Este amplio rango hace que el IPP30 sea especialmente adecuado para la conservación de muestras sensibles, estudios de estabilidad y cultivos microbiológicos que requieren un control preciso de las condiciones térmicas.
El diseño del Memmert IPP30 se basa en una combinación de rendimiento térmico y eficiencia energética. Mediante el uso de un módulo Peltier integrado en la parte trasera del aparato, garantiza un calentamiento y enfriamiento rápidos, al tiempo que reduce significativamente el consumo eléctrico en comparación con los sistemas tradicionales con compresor. Este enfoque técnico permite limitar la generación de calor en el entorno de trabajo, lo que contribuye a un mayor confort en el laboratorio y a una reducción de los costes de explotación.
La interfaz de control digital, equipada con una pantalla a color de alta definición, facilita la programación y el seguimiento de los ciclos térmicos. Parámetros como la temperatura, el tiempo de incubación y las opciones de temporización se pueden ajustar con precisión, mientras que la función SetpointWAIT garantiza que el tiempo de proceso no comience hasta que se alcance la temperatura objetivo. Además, el aparato incorpora un sistema de calibración que permite definir tres valores de temperatura personalizados para adaptar la incubadora a las necesidades específicas de cada protocolo experimental.
El Memmert IPP30 también está diseñado para garantizar una homogeneidad perfecta de la temperatura gracias a su sistema de ventilación forzada por ventilador Peltier. Esta circulación de aire controlada garantiza que todas las zonas de la cámara disfruten de las mismas condiciones térmicas, lo que es esencial para obtener resultados reproducibles. En caso de corte de corriente, un programa de documentación integrado registra los datos, preservando así la trazabilidad de las condiciones experimentales.
La seguridad es fundamental en el diseño del Memmert IPP30. Está equipado con un doble dispositivo de protección contra sobrecalentamiento: un regulador electrónico ajustable y un limitador mecánico. Su sistema de autodiagnóstico detecta y señala cualquier anomalía en el funcionamiento, lo que permite una intervención rápida para evitar el deterioro de las muestras.
El interior, de acero inoxidable electropulido, no solo es duradero, sino también fácil de limpiar, lo que cumple con los estrictos requisitos de higiene de los laboratorios. El volumen útil de 32 litros permite alojar diferentes tipos de muestras, con una capacidad máxima de tres niveles de rejillas y una carga total soportada de hasta 60 kg. La puerta doble, compuesta por una puerta exterior totalmente aislada y una puerta interior acristalada, permite visualizar el contenido sin alterar las condiciones internas.
Compacto y ergonómico, el Memmert IPP30 se integra fácilmente en cualquier entorno de trabajo. Sus dimensiones y su reducido tamaño lo convierten en una opción acertada para laboratorios con espacio limitado que buscan un rendimiento térmico fiable y constante. Su versatilidad, precisión y eficiencia energética lo convierten en una herramienta indispensable para todas las aplicaciones que requieren un control térmico riguroso y duradero.