HettCube 200: incubación de precisión para su laboratorio
La incubadora HettCube 200 de Hettich destaca por su fiabilidad, facilidad de uso y formato ergonómico. Ideal para laboratorios de microbiología, permite una incubación estable con un excelente control de la temperatura sin necesidad de ventilador interno. Esto garantiza una circulación natural del aire, evitando turbulencias que puedan alterar las muestras. Este funcionamiento sin ventilación forzada también garantiza un bajo consumo energético y un nivel sonoro reducido, ideal para entornos sensibles.
Diseñado para ofrecer un equilibrio óptimo entre rendimiento energético, eficiencia espacial y comodidad de uso, el HettCube 200 es compacto, con una superficie de solo 0,6 m², y ofrece un volumen útil validado de 82 litros. Su puerta ciega, con cierre magnético, se abre con una sola mano sin puerta acristalada intermedia, y su sentido de apertura se puede invertir fácilmente según las necesidades del laboratorio.
La interfaz táctil de 4,3 pulgadas ofrece un acceso rápido a todas las funciones de programación. Los usuarios pueden visualizar en tiempo real los parámetros de temperatura, los eventos, las alarmas, los ciclos programados o incluso los historiales de uso. El aparato también permite personalizar numerosos parámetros, comola alarma de apertura de la puerta o las tolerancias térmicas. El sistema integra hasta 99 funciones programables, incluyendo el arranque diferido o los ciclos basados en la temperatura o el tiempo.
El HettCube 200 incluye dos estantes de acero inoxidable: un estante estándar y un estante con guías telescópicas HTS. El espacio interior, totalmente de acero inoxidable (1.4301), está diseñado para durar y facilitar la limpieza. La incubadora es compatible con un certificado de conformidad HettCert, basado en mediciones de temperatura según la norma DIN 12880:2007-05, que acredita su estabilidad térmica.
Para necesidades específicas, hay disponibles numerosos accesorios opcionales: cajones de diferentes alturas, bastidores para placas de Petri o tubos Lowenstein, cuadro de distribución, puerta de cristal, sonda de temperatura independiente y kit de apilamiento para ahorrar espacio vertical.
En la versión refrigerada (HettCube 200 R), permite bajar hasta 0 °C gracias a un controlador de temperatura de clase 3.2. Esta versión también incluye una función «vacaciones», útil para largos periodos de inactividad, y la posibilidad de controlar dispositivos externos.
El HettCube 200 se impone como una opción fiable y funcional para todos los profesionales que buscan una incubadora microbiológica compacta, silenciosa y fácil de integrar en su entorno de trabajo.