Lámpara germicida con radiación UV-C directa NBV 2x30 PL: desinfección eficaz del aire y las superficies
La NBV 2x30 PL es una lámpara germicida con radiación UV-C directa, especialmente diseñada para prevenir infecciones primarias y secundarias en entornos médicos, eliminando los microorganismos patógenos presentes en el aire y en las superficies. Gracias a la radiación germicida UV-C, esta lámpara es ideal para habitaciones de pacientes infectados o con riesgo inmunológico, lo que reduce considerablemente la propagación de infecciones aéreas.
La luz UV-C, con una longitud de onda de 253,7 nm, es conocida por su eficacia para destruir virus, bacterias, moho y otros microorganismos. Esta tecnología se utiliza en diversos sectores, como quirófanos, salas de cuidados, laboratorios y en la industria farmacéutica, alimentaria y cosmética. La eficacia de la lámpara está confirmada por auditorías, lo que garantiza un entorno más saludable.
La NBV 2x30 PL se distingue por su capacidad para cubrir una superficie de 18 a 22 m², dependiendo de la configuración de la habitación. Está equipada con dos bombillas UV-C de 30 W que, combinadas con un reflector de aluminio de alta calidad, garantizan un rendimiento óptimo de desinfección. Su cuerpo de aluminio lacado y su diseño compacto permiten una instalación fácil y duradera.
El funcionamiento de la lámpara es continuo y debe utilizarse sin presencia humana, animal o vegetal en la estancia durante el proceso de desinfección. Además, la lámpara está equipada con un contador digital interno con señal acústica para indicar el tiempo de funcionamiento, sin display visual, para facilitar la gestión de su uso.
La lámpara NBV 2x30 PL debe instalarse en un soporte móvil, lo que permite una gran flexibilidad para desplazarla entre diferentes zonas. Este tipo de montaje es esencial para entornos que requieren una desinfección frecuente en diversas habitaciones o zonas.
Los parámetros técnicos de la lámpara garantizan una gran seguridad de uso: está clasificada en la clase de protección contra descargas eléctricas I y cuenta con protección IP20, lo que la hace resistente al polvo y la humedad. La vida útil de las bombillas es de al menos 8000 horas, lo que garantiza una larga vida útil sin necesidad de sustituir frecuentemente las lámparas UV-C.
Esta lámpara es especialmente adecuada para entornos sanitarios en los que la esterilidad del aire es fundamental, como quirófanos, habitaciones de pacientes, clínicas o cualquier otro espacio en el que sea esencial la protección contra infecciones. Contribuye eficazmente a mantener un alto nivel de limpieza microbiológica del aire y las superficies.