Unidad electroquirúrgica Erbe ICC 50: alto rendimiento para procedimientos quirúrgicos.
La Erbe ICC 50 es una unidad eléctrica de coagulación tisular diseñada para satisfacer las necesidades de los procedimientos quirúrgicos. Con una potencia máxima de 50 W, ofrece un control eficaz de las hemorragias, lo que resulta especialmente útil en intervenciones quirúrgicas menores, por lo que es una opción ideal para su uso en consultas médicas. Su versatilidad también la hace recomendable para aplicaciones en cosmetología para intervenciones de pequeña envergadura.
Esta unidad es muy fiable para los profesionales sanitarios que buscan una coagulación tisular eficaz y un control de las hemorragias. Su potencia es adecuada para una gran variedad de procedimientos quirúrgicos y su funcionamiento es intuitivo, lo que resulta muy práctico para los médicos.
Con un peso de solo 2,8 kg y unas dimensiones compactas de 275 x 105 x 255 mm (ancho x alto x profundidad), es fácil de manejar e integrar en entornos clínicos. Su modo de funcionamiento NESSY garantiza un alto rendimiento y un uso seguro.
Además, el Erbe ICC 50 ofrece varios modos de funcionamiento, adaptándose con precisión a las necesidades específicas de cada procedimiento quirúrgico, lo que garantiza resultados óptimos y una mayor seguridad para el paciente.
Los diferentes modos de funcionamiento del Erbe ICC50 ofrecen una variedad de opciones para satisfacer las necesidades específicas de cada intervención quirúrgica:
- Corte automático: este modo funciona a 50 W con una impedancia de 500 ohmios. Está diseñado para cortes precisos durante la intervención, lo que ofrece una solución eficaz para la ablación de tejidos.
- Coagulación suave: en este modo se realiza una coagulación suave, lo que proporciona un proceso de coagulación controlado y delicado. Es ideal para detener hemorragias leves y controlar los vasos sanguíneos pequeños durante la cirugía.
- Coagulación forzada: este modo funciona a 50 W con una impedancia de 500 ohmios. Está diseñado para proporcionar una coagulación más intensa y rápida, adecuada para detener hemorragias más importantes y controlar los vasos sanguíneos de tamaño medio.
- Coagulación bipolar: En este modo, se realiza la coagulación bipolar, lo que permite una coagulación precisa de los tejidos sin dañar los tejidos circundantes. Es especialmente útil en intervenciones que requieren una coagulación delicada y precisa, como la cirugía ocular y las intervenciones neuroquirúrgicas.
Cada modo ofrece un enfoque único para la coagulación de los tejidos, lo que permite al cirujano seleccionar la configuración más adecuada en función de las necesidades específicas de la intervención y las características de los tejidos a tratar.